En 2010 se incorporó a nuestro Código Penal la responsabilidad penal de las personas jurídicas. Este artículo tratará de cómo las empresas pueden enfrentarse a posibles sanciones por determinados delitos y ofrecerá formas de evitar que se produzcan.
Es importante comprender las implicaciones jurídicas de la responsabilidad penal de las empresas. Las leyes establecen que si una empresa comete determinados delitos, sus directivos y empleados pueden ser considerados penalmente responsables. En otras palabras, las personas pueden enfrentarse a un proceso penal aunque no sean personalmente responsables del delito.
Qué es la Responsabilidad Penal de las Empresas
La entrada vigor de la responsabilidad penal de las personas jurídicas en España, permitió castigar a empresas, fundaciones y asociaciones por determinados tipos de delitos cometidos por sus empleados o representantes. Se pueden aplicar penas como multas e intervención judicial junto con otras sanciones, incluida la posible disolución. Esta nueva legislación se adhiere a las directivas de la Unión Europea (UE) destinadas a mejorar la responsabilidad de las empresas, al tiempo que promueve la justicia a través de una mayor rendición de cuentas a nivel organizativo.
Cuándo es penalmente responsable una empresa
Las empresas pueden ser objeto de acciones penales, según lo dispuesto en el artículo 31 bis del Código Penal, en caso de que los delitos sean cometidos por sus representantes legales o administradores.
Además, las acciones de los miembros del personal que resulten en un beneficio directo para la empresa también pueden dar lugar a una penalización, cuando no se hayan establecido medidas preventivas. En pocas palabras, si un directivo se beneficia de cualquier delito que cometa bajo una entidad; entonces dicha entidad se enfrentará a un enjuiciamiento en virtud de esta ley.
Por otro lado, si los empleados infringen la ley en el ejercicio de sus funciones y la empresa se beneficia de ello, puede ser objeto de sanciones penales, además de la responsabilidad civil. Esto significa que tanto las personas jurídicas como los trabajadores implicados pueden ser considerados responsables cuando no se apliquen medidas preventivas o se intente controlar el comportamiento.
De qué delitos pueden ser responsables las empresas
En general, las empresas son responsables de los delitos cometidos por sus empleados o representantes, como el fraude y la corrupción. Sin embargo, hay algunas excepciones a esta regla. Por ejemplo, la responsabilidad penal de las personas jurídicas no se aplica en casos de homicidio o lesiones físicas causadas por sus miembros, aunque sí pueden tener responsabilidad civil.
Las empresas, organizaciones y asociaciones deben ser conscientes de las sanciones penales que pueden derivarse de infringir las leyes. Saber qué delitos desencadenan estos cargos es esencial para que cualquier entidad jurídica evite enfrentarse a penas severas.
- Revelación de información privada
- Movimiento y ocultación de capital ilegal
- Estafa
- Insolvencias
- Delitos sistemas de información
- Delitos competencia desleal, en patentes y marcas
- Contrabando
- Delitos contra el consumo
- Delitos contra los trabajadores
- Delitos fiscales
- Corrupción, y cohecho
- Delitos urbanísticos
- Acoso laboral
- Delitos sexuales
Qué Entidades Jurídicas tienen responsabilidad Penal
Hay ciertas excepciones de personas jurídicas que no tienen responsabilidad penal:
- El Estado
- Las administraciones públicas
- Organismos de Regulación
- Agencias Públicas para Empresas
- Organizaciones derecho público
- Sociedades Estatales
Qué sanciones puede implicar esta responsabilidad penal
Las personas jurídicas pueden enfrentarse a graves consecuencias por cometer un delito – de acuerdo con el artículo 33.7 del Código Penal, existen múltiples tipos de penas que podrían imponerse como castigo. Es imperativo tomarlas en serio y comprender sus implicaciones si una entidad es acusada.
- Multa proporcional al beneficio obtenido por el delito
- Disolución de la empresa o entidad
- Suspensión de actividades durante cinco años máximo
- Cierre de locales durante un periodo máximo de cinco años
- Prohibición de realizar actividades relacionadas con el delito cometido
- Prohibición de subvenciones o contratación con la Administración Pública durante un periodo máximo de quince años
- Intervención de la empresa judicial, hasta un máximo de cinco años.
- En delitos de acoso y acoso sexual, multa de 6 meses a 2 años.
- En delitos de prostitución, explotación y corrupción de menores, disolución
El Código Penal también tiene en cuenta algunos atenuantes para rebajar las penalizaciones:
- Que la empresa denuncie el delito antes de ser descubierta
- Colaboración con la investigación
- Reparar el daño causado
- Establecer medidas que sirvan para prevenir nuevos delitos, como es el caso de un un plan de compliance penal
Formas de prevenir la responsabilidad penal en una entidad jurídica
Las empresas deben tomar todas las medidas necesarias para prevenir la responsabilidad penal y garantizar el cumplimiento de la ley. Deben contar con un procedimiento exhaustivo de evaluación de riesgos y supervisarlo periódicamente, así como invertir en la formación del personal encargado de garantizar el cumplimiento. Por último, deben mantener una línea de comunicación abierta con sus abogados y otros asesores jurídicos para asegurarse de que están al día de cualquier cambio o evolución en materia de responsabilidad penal de las empresas.
Al comprender las posibles sanciones y tomar medidas proactivas para proteger a su empresa de la responsabilidad penal, puede minimizar el riesgo de enfrentarse a graves consecuencias por cometer un delito. Con una planificación y aplicación adecuadas, se puede ayudar a mantener la empresa fuera de problemas.
Actuaciones importantes para la prevención de la responsabilidad penal de las personas jurídicas:
- Establecer un programa de cumplimiento corporativo o programa compliance: Un programa de cumplimiento corporativo es un sistema de control interno que ayuda a las empresas a cumplir las leyes y reglamentos, así como las normas éticas. Estos programas crean sistemas para evaluar los riesgos, supervisar los cambios en la legislación y formar a los empleados en materia de conducta ética
- Adoptar una estrategia eficaz de gestión de riesgos: Las empresas deben contar con una estrategia de gestión de riesgos que identifique los riesgos potenciales asociados a sus actividades empresariales. Esto les permite crear medidas preventivas y mitigar cualquier responsabilidad potencial si se produce el peor de los casos
- Promover prácticas de buen gobierno: Las buenas prácticas de gobierno corporativo ayudarán a las empresas a garantizar que cumplen todas las leyes y reglamentos aplicables.
Si quieres realizar un plan de prevención adecuado, o ya has incurrido en la responsabilidad penal no dudes en contactar con nuestros abogados expertos en compliance penal.